Un éxito rotundo fue el alcanzado por los organizadores de la Noche de las Estrellas 2014 realizado de manera simultánea en la Unidad Académica Chetumal de la Universidad y centenares de instituciones en el país, el pasado sábado 29 de noviembre; en Quintana Roo la actividad tuvo lugar también en Cancún, como subsede.

El doctor Omar Yam Gmboa, coordinador estatal del evento, destacó que este año hayan participado en el comité estatal el Consejo Quintanarroense de Ciencia y Tecnología a través de los planetarios en Chetumal y Cancún, y el Club de Ciencias de la DCI, formado por entusiastas egresados y alumnos de las carreras de ingeniería.

Del mismo modo precisó que la Noche de las Estrellas es una fiesta astronómica que se ha realizado con gran éxito desde el año 2009; cada año se presenta con una temática representativa a nivel mundial congregando hasta el día de hoy a más de 500,000 personas.

Yam Gamboa sostuvo que: "En México tenemos un gusto especial por la astronomía. Esta disciplina ha sido la puerta de entrada para que un público muy amplio se ponga en contacto con la ciencia. En este sentido es que la Noche de las Estrellas intenta afianzar una cultura científica a través de la astronomía en todos los estratos de la población, conjuntando esfuerzos de las instituciones científicas y de divulgación de la Ciencia más importantes del país, así como la participación de distribuidores de telescopios y grupos de astrónomos aficionados".

A su vez el ingeniero, Antonio Ríos Arreola, egresado de Ingeniería en Redes y responsable del telescopio en el Planetario de la capital del Estado, recordó que la primera edición ocurrió en el marco del Año Internacional de la Astronomía 2009, que calentó motores con una observación masiva del eclipse de Luna celebrada en febrero de 2008 en el Zócalo del Distrito Federal, en colaboración con amigos franceses, quienes realizan la Noche de las Estrellas cada año desde 1991 en más de 400 lugares.

Rios Arreola destacó que la misión de este evento es llevar la astronomía a la mayor cantidad de personas posible, para lo cual se ha desarrollado una dinámica, que consiste en invitar a los propietarios de telescopios a ponerlos a la disposición del público que asista a la Noche de las Estrellas, todo con la intensión de facilitar la observación del cielo a personas con pocas o nulas posibilidades de realizarla.

Recordó que como parte del comité el objetivo final es que la Noche de las Estrellas sea como una gran fiesta popular que se celebre en todo el país y que permita ayudar a construir una cultura científica a través de la astronomía.

Este año las actividades en Chetumal se realizaron en dos noches, el viernes 28 y el sábado 29 de noviembre con diversas actividades de carácter científico y cultural con la finalidad de hacer llegar a la gente el interés por las ciencias.

Invitado por el Club de Ciencias  partició como conferencista Pablo Pacheco, Encargado del Planetario Alfa, de Monterrey Nuevo León.

El Comité Nacional está conformado por diversas instituciones: Instituto Politécnico Nacional, Academia Mexicana de Ciencias, AC, Agencia Espacial Mexicana, Alianzas Francesas México, Asociación Mexicana de Distribuidores de Telescopios y Binoculares, Asociación Mexicana de Planetarios, AC, Celestron, Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, Embajada de Francia, Instituto de Astronomía - UNAM, Instituto Nacional de Astrofísica Óptica y Electrónica, Universidad Nacional Autónoma de México, Sociedades Astronómicas de la Noche de las Estrellas.

Este año 2014, como ya es su estilo desde 2009, la Noche de las Estrellas dedicó su verbena celeste anual a un tema relacionado con la ciencia y su cultura, como han sido los años internacionales de la Astronomía, motivado por el quinto centenario de la primera vez que un humano observó el cielo con un instrumento, Galileo y su telescopio. El Año Internacional de la Cristalografía 2014 conmemora no sólo el centenario de la difracción de rayos X, que permitió el estudio detallado del material cristalino, sino también el 400 aniversario de la observación de Johannes Kepler, en 1611, de la forma simétrica de los cristales de hielo, que inició el estudio más amplio del papel de la simetría en la materia.