Bajo la premisa “Conocer para conservar”, este 24 de noviembre se conmemoró el Día Internacional de la Conservación, con el que se da inicio al Decenio de la Conservación postulado por la Organización de las Naciones Unidas, desarrollando un evento con pláticas sobre proyectos en áreas naturales protegidas, ecosistemas costeros y pesquerías, organizadas por la División de Desarrollo Sustentable, a través del Cuerpo Académico de Vulnerabilidad y Biodiversidad de Sistemas Acuáticos Continentales y Costeros y la Maestría en Ciencias Marinas y Costeras.

En primera instancia, la MC Blanca Quiroga García, de la Conanp en Cozumel, presentó la conferencia magistral “Legislación ambiental en Áreas Naturales Protegidas: énfasis en el Parque Marino Arrecifes de Cozumel”, en donde llevó a los presentes a un desarrollo desde la constitución hasta las leyes secundarias en materia ambiental y las propias reglas operativas de la zona arrecifal.

Mostró ante los estudiantes de posgrado presentes, los puntos principales de conservación que hay en la isla y las 5 áreas de protección, de las que 2 son federales y 3 son de carácter estatal, además de que toda la isla está decretada como reserva de la biosfera con diferentes puntos para conservar, y en donde se requiere de la participación de investigadores, de los estudiantes de licenciatura y maestría para realizar la exploración que se requiere.

Por otra parte, el Dr. Edgar Torres Guerrero, de la ENES Mérida, presentó la ponencia “Retos y oportunidades en el manejo de las pesquerías artesanales”, en la que mostró las investigaciones que se desarrollan en este tipo de pesquerías y cómo estas son menos contaminantes e impactantes que las industriales, desde el uso de combustibles fósiles, el uso de artes de pesca sustentables entre otros temas.

Finalmente, la Dra. Sara Morales Ojeda del Cinvestav Mérida presentó la ponencia “Evaluación de la costa norte de Yucatán con un enfoque de cuenca y cuantificación de servicio ecosistémico de almacén de carbono en sus humedales”, en la cual habló cómo se ha transformado, por la mano del hombre, el panorama costero de la península, lo que ha ocasionado la reducción de los almacenes de carbono naturales y la integridad ecológica.

Con datos del INEGI, de los censos poblacionales y económicos y de investigaciones previas, se pudo constatar que la presencia de fósforo y de nitrógeno van aparejados a las actividades humanas, afectando la vulnerabilidad de los ambientes costeros.

Cabe destacar que este Decenio de la Conservación surge de la necesidad de restaurar los ecosistemas degradados y es más urgente que nunca. Los ecosistemas sustentan toda la vida en la tierra, cuanto más sanos sean los ecosistemas, más sano será el planeta y sus habitantes.

Asimismo, se buscan soluciones que pueden potenciarse para cumplir los objetivos del Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas para prevenir, detener e invertir la degradación en todos los continentes y en los océanos, lo que sólo puede hacerse con la participación de todos.